La CE ataca las autonomías y exige más recortes
Rehn se niega, de momento, a dar una prórroga hasta el 2014 a Rajoy y culpa a las comunidades de la desviación
El Estado español incumplirá este año y el próximo el objetivo de déficit, que se mantendrá en el 6,4% y el 6,3%
Rajoy incumplirá, y por mucho, el objetivo de déficit tanto este año como el que viene, pero la culpa la tienen las autonomías, según Bruselas.
La Comisión Europea volvió a disparar ayer contra sus sospechosos habituales, los "gobiernos regionales", a los que culpó en gran medida del agujero de las finanzas españolas:
según sus cálculos, este 2012 el déficit público del Estado será de un 6,4% en vez del 5,3% exigido, una desviación de unos 11.000 millones de euros.
Y el año que viene el desfase de los números rojos aún podría ser peor, de más de tres puntos si no se suba el IVA ni se hicieran más reformas y recortes.
Inflexible, aunque la evidencia de que el Estado español no podrá cumplir el 3% el próximo año, el eurocomisario de Asuntos Económicos y Monetarios, Olli Rehn, se niega a dar oxígeno y margen de tiempo a Rajoy.
Bruselas descarta, de momento, conceder ninguna prórroga de un año, hasta el 2014, el gobierno del PP, a pesar de la revuelta contra la austeridad que sube desde París, con el asalto del socialista François Hollande a la Elíseo y su ofensiva diplomática para aislar Merkel.
Y no sólo eso: el 30 de mayo, Rehn podría imponer más recortes en el Estado y, en concreto, a las autonomías.
Semestre negro
Rehn pintó ayer, en la presentación de sus previsiones económicas, un segundo semestre negro para la economía española.
Pero negó que sea consecuencia de la sobredosis de austeridad recetada por él mismo y por la canciller alemana (y que si no está llevando España por el mismo camino que Grecia y Portugal al menos lo parece).
"Sería una lectura demasiado simplista, no podemos acumular deuda y más deuda, es esencial continuar la consolidación fiscal", repitió.
En Bruselas ha arraigado el mensaje, repetido incansablemente tanto por el PP como por el PSOE cumbre tras cumbre, que la culpa del déficit español es de las autonomías, que tienen la mano agujereada.
"Los gobiernos regionales, que aún no han especificado qué nuevos recortes harán, son los responsables de gran parte de la desviación", denunció Rehn, que incluso guiñó un ojo a Rajoy celebrando que su ejecutivo esté " ajustando fuerza a los objetivos ".
El eurocomisario finlandés pidió al gobierno de Mariano Rajoy que controle "de manera inmediata y rigurosa" la "gasto excesivo de las autonomías", para "reducir y minimizar el riesgo de que haya ninguna desliz".
Rehn desconfía sobre todo de las trece comunidades que en mayo del año pasado tenían elecciones y gastaron como si no pasara nada, mientras la Generalitat ya hacía "un recorte de proporciones nunca vistas", según admitió el propio portavoz del eurocomisario .
El déficit de la Seguridad Social también explica, según la CE, parte de la desviación de los números rojos, que el año que viene no bajarían del 6,3%, el doble del máximo permitido (estimación que Bruselas hace sin tener en cuenta que el PP ya ha adelantado que subirá el IVA).
30/05/12
Es cuando la Comisión Europea decidirá si impone al gobierno de Rajoy recortes adicionales o le alarga el plazo.
Evitar otro gasto excesivo
El 30 de mayo, después de haberse mirado con lupa las cuentas de las autonomías para evitar otro "gasto excesivo" y de asegurarse de que el gobierno español limpieza de una vez los nefastos activos inmobiliarios de sus entidades bancarias,
el eurocomisario de Asuntos Económicos y Monetarios, Olli Rehn, anunciará si da más flexibilidad al gobierno de Rajoy o si le impone más recortes.
Todo indica que hará, a la vez, ambas cosas: por un lado, asumir que el gobierno español necesita un año más de tiempo para sanear las cuentas, pero, por otro, exigirle a cambio de que apriete las comunidades autónomas.
La decisión final, sin embargo, también dependerá de si el flamante presidente electo de Francia, François Hollande, convence o no la canciller Merkel, en su primera reunión del martes en Berlín, y el resto de la derecha europea en la cena informal de jefes de Estado y de Gobierno en Bruselas el 23 de mayo.
Este lunes, el ministro español de Economía, Luis de Guindos, le espera un tercer grado de sus homólogos del euro, que le exigirán más transparencia.
